La Sala II de Casación rechazó un recurso que buscaba reabrir la investigación sobre el asesinato del coronel Argentino del Valle Larrabure, quien fue secuestrado por el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) en 1974 y apareció muerto al año siguiente.
De esta manera, Casación confirmó un fallo previo de la Cámara Federal de Rosario que había considerado inadmisible que se considere el hecho como un delito de lesa humanidad. El archivo de la causa fue rubricado con los votos de los jueces Alejandro Slokar, Angela Ledesma y Guillermo Yacobucci.
El 10 de agosto de 1974, un comando de militantes del grupo armado tomaron la Fábrica Militar de Pólvora y Explosivos de Villa María, Córdoba, y como parte del operativo secuestraron al subdirector del establecimiento, el ingeniero químico y mayor del Ejército Larrabure.
Un total de 372 días más tarde aparecería su cadáver en un zanjón de Rosario: de acuerdo a la versión de la querella, el coronel fue torturado y finalmente asesinado por sus captores.
En los fundamentos, los camaristas argumentaron que «no corresponde aplicar» a los hechos relatados «las categorías de los crímenes de lesa humanidad y de los crímenes de guerra» como solicitaba el representante legal de la familia del represor.
«Pese a su empeño, la querella no ha logrado acreditar hasta el momento la colaboración, apoyo o tolerancia por parte del Estado con el accionar de la organización ERP, lo que obsta a que los hechos sean declarados imprescriptibles», sostuvieron los jueces en uno de los párrafos el fallo.
También rechazaron el pedido de la querella para que se cite a indagatoria en calidad de imputado por el secuestro y homicidio del militar al miembro del ERP Juan Arnol Kremer para que de cuenta de su versión sobre los hechos que implicaron la muerte de Larrabure.
La abogada de la agrupación HIJOS celebró la resolución del tribunal al sostener que «pese al disciplinamiento que pretende el Poder Ejecutivo, sigue habiendo jueces que fallan conforme a la Constitución y a la vigencia de los tratados de derechos humanos».
«Siempre supimos que todos los argumentos legales estaban y están de nuestro lado. Ahora, las distintas esferas judiciales lo están confirmando», agregó.