Tras la oficialización de la Superfinal entre River y Boca en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid, miles de aficionados quisieron comunicarse a España para averiguar precios de entradas y cuestiones de logísticas.
Por ese motivo, la Real Federación Española de Fútbol tuvo que inhabilitar el teléfono por la enorme cantidad de consultas de parte de los hinchas argentinos y de todas partes del mundo que quieren presenciar el duelo entre xeneizes y millonarios por la final de la Copa Libertadores.
Según informó el diario Marca, el contestador automático quedó bloqueado luego de la ola de solicitudes, en especial por la información sobre la venta de entradas luego de que la Conmebol anunció el cambio de sede como castigo al Millonario por los incidentes en el Monumental.