En el marco de lo que sería la Asamblea de Memoria y Balance de la gestión 2016/17, se vivieron una serie de aprietes, insultos e inclusive amenazas directas contra diferentes referentes del arco opositor a la actual conducción del Club del Parque de la Independencia.
Tal es así, que la Asamblea no se pudo llevar adelante de la mejor manera por los incidentes que finalmente hicieron que sea una tarde oscura para la democracia de Newell’s.
Destacar que durante el acto no se contó con la presencia del presidente del club, Eduardo Bermúdez, a raíz de “problemas de salud”, según contó a los medios José Menchón, secretario general de la institución.
El primer llamado para el arranque de la reunión de asociados, fue realizado cerca de las 18hs del miércoles. A raíz de la (hasta ese momento) poca concurrencia de socios, se tomó la decisión de darle comienzo a la Asamblea a las 19, de acuerdo con lo que estipulan los estatutos de la institución.
Se fueron acercando los socios, entre un llamado y el otro, hasta casi completar el espacio reservado para ellos en el Estadio Cubierto Claudio Newell. Así fue como apenas pasadas las 19hs se comenzó a leer el cronograma del día.
El primer punto, como en todas las asambleas, fue el de definir quienes la presidirían. Casi todas las ultimas asambleas tuvieron como primera voz a alguien de la oposición. La primera moción presentada la encabezaba Juan Matías, vicepresidente primero del club, y la segunda Daniel Giraudo representando las voces de la oposición (algo que se sabía de antemano y se consensuó entre las diferentes agrupaciones).
Luego de presentadas las mociones se pasó a la elección de la misma, y allí fue cuando comenzaron los problemas. A diferencia de asambleas anteriores, donde la oposición ganaba por amplia mayoría, el voto estuvo bastante dividido y parecía muy complicado hacer un recuento de las manos que se encontraban en alza. Así, la oposición comenzó a aplaudir, demostrando de esa manera que consideraban que su moción se había impuesto sobre la del oficialismo. Daniel Giraudo empezó a dirigirse al escritorio desde donde se presiden las asambleas.
El oficialismo y quienes hoy coinciden con la actual comisión directiva comenzaron a cantar en contra de esto haciendo alusión a que la “victoria” no estaba del todo clara. Entre algunos empujones y varios insultos, se llamó a que la votación se realice nuevamente. En esta oportunidad se propuso que quienes votasen por la moción primera (oficialismo) se sentaran del lado derecho del Estadio Cubierto, y quienes prefirieran la alternativa de la oposición lo hiciesen, del lado izquierdo.
Nuevamente a alzar las manos y en esta oportunidad la mayoría parecía estar del lado derecho de la cancha. Así fue como, nuevamente, Giraudo se dirigió hacia adelante para presidir la Asamblea y ahí fue cuando todo se puso más que tenso.
“Soy de Newell’s, soy de Newell’s” cantaba la oposición y los socios que no estaban de acuerdo con la gestión actual, mientras que el oficialismo hacía lo propio haciendo referencia a que los primeros querían que el club termine en “la intervención”.
El ambiente ya era todo menos lo que se cree de un acto democrático y así comenzaron los insultos, los empujones, las piñas y finalmente volaron sillas de derecha a izquierda.
Mientras por los parlantes se escuchaba al secretario José Menchón decir que se frenen los incidentes porque “la asamblea se suspendería”, la barbarie se hacía cada vez más grande y no había indicios de que la violencia cese.
Manchado el acto,con un tinte de oscura tonalidad, casi la mayoría de quienes votaron por Giraudo comenzaron a retirarse del lugar, algunos por motus propio y otros a raíz de los golpes recibidos por un sector de violentos que se encontraba en la Asamblea.
A las afueras de la asamblea, en el palomar, se encontraban barras de Newell’s (bombo en mano) haciendo que la salida sea también terrorífica para muchos de los que tuvieron que dejar el Cubierto.
Inesperadamente, y quedando dentro del club prácticamente en su totalidad oficialistas, se votó por amplía mayoría por la aprobación de la memoria y balance 2016/17.
Si bien la Inspección General de Personería Jurídica dio como válida la Asamblea, existe la posibilidad de que esta pase a tener nulidad, investigación mediante.
Estuvo también presente el Ministerio de Seguridad; quien grabó la situación en su totalidad con dos cámaras de alta definición que se usarán para identificar a quienes comenzaron con los disturbios en el acto que se pretendía llevar a cabo como una bandera a la democracia.
Como si fuera poco, parte de la oposición plantea dirigirse a fiscalía para atestiguar sobre lo que sucedió, mientras Cristian D’Amico, vicepresidente segundo, aseguró que hará lo mismo sumando el uso de las cámaras del Ministerio de Seguridad.
En las últimas horas de ayer, el club lanzó un comunicado, titulado: “La Asamblea de Socios aprobó el Balance 2016/17” y además se agregó, respecto a los incidentes que “se responsabiliza de forma directa a los socios Federico Ripani y Daniel Giraudo”.