El último semestre de 2016 fue a puro éxito para Juan Martín Del Potro,con triunfos resonantes frente a Nadal y Djokovic en los Juegos Olímpicos (que coronaría con una medalla plateada), hasta culminar con la histórica consagración de Argentina en la Copa Davis, con la «Torre de Tandil» como pieza fundamental para conseguir el título.
La conclusión más recurrente a la que llegaban la mayoría de los especialistas en la materia, colegas y simples espectadores del tenis, era que «Delpo estaba de regreso». Otra vez, como en sus mejores años entre 2009 y 2012, el tandilense parecía poder darle pelea a los reyes de este deporte.
Sin embargo, en contra de cualquier pronóstico, el 2017 viene siendo puras frustraciones para el mejor tenista argentino de la actualidad (ocupa el puesto 31 en el ranking ATP).
Casualmente, casi como si fuese una continuación de su 2016, la mejor actuación de Delpo hasta el momento fue en febrero cuando tras no participar del Austalia Open para priorizar su pretemporada, llegó a semifinales en Delray Beach y perdió ante el canadiense Milos Raonic por 6/3 y 7/6.
Lo más destacado que se encuentra en los registros del tandilense fueron los cuartos de final del Master 1000 de Roma en mayo. En esa instancia cayó por 6/1 y 6/4 frente a Djokovic.
En cuanto a los dos Grand Slam de los que participó, tampoco logró trascender demasiado: en Roland Garros accedió a tercera ronda y el actual número 1, Murray, puso fin a su camino en sets corridos, (7/6, 7/5 y 6/0) mientras que en Wimbledon apenas llegó a un segundo partido, cuando el letón Ernest Gulbis lo venció 6/4, 6/4 y 7/6.
Su más reciente actuación fue en la segunda ronda del Master 1000 de Montreal cuando dio buenos indicios de recuperación en la primera ronda al vencer al estadounidense John Isner por un doble 7/5, aunque en la fase siguiente cayó frente al local de apenas 18 años, Denis Shapovalov, por 6/3 y 7/6.
En resumen, hasta el momento Del Potro no logró títulos pero lo que es aún es más llamativo, no pudo acceder a ninguna final sobre 11 torneos disputados, teniendo en la mayoría de ellos perfomances muy por debajo de lo esperado. Aún queda para la «Torre de Tandil» un último gran desafío: el US Open ente el 28 de agosto y el 10 de septiembre.