El ex militar bosniocroata Slobodan Praljak conmocionó La Haya, tras suicidarse en pleno juicio ingiriendo veneno. Durante el mismo, se lo acusaba de crímenes de guerra durante el conflicto en Bosnia-Herzegovina. entre los 1992 y 1995.
Mientras el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) rechazaba su apelación y confirmaba una sentencia de 20 años de prisión, el ex teniente se paró e interrumpió la resolución. “Praljak no es un criminal, rechazo su veredicto”, gritó después de alertar que tenía veneno.
El juez que estaba a cargo de la sentencia, Carmel Aguis, le pidió que no lo hiciera, pero el bosniocroata no obedeció y bebió un líquido que llevaba consigo dentro de una botella consigo. Seguidamente, el proceso fue interrumpido y trasladaron al acusado en una ambulancia para que reciba atención médica. Minutos después, los médicos del establecimiento reportaron que el ex teniente general del Ejército croata había muerto.
Praljak estaba acusado por asesinato, deportación, maltrato de civiles, violaciones y apropiación de bienes, entre otros crímenes cometidos por sus tropas de guerra.Además, una de las peores causas en su contra es haber ordenado la destrucción del puente Stari Most en 1993. Este hecho ha sido calificado como un ataque deliberado a la identidad cultural de los bosniaks.