La caída del avión Mitsubishi matrícula LV-MCV sigue siendo un misterio. Anoche se hallaron restos de la aeronave en un pantano lindero al río Paraná Guazú, pero aún no hay noticias sobre los tres tripulantes que despegaron hace ya un mes del aeropuerto de San Fernando.
Tras el hallazgo de los restos de la aeronave en el kilómetro 141,5 del Paraná Guazú, la Junta de Investigaciones de Accidentes de Aviación Civil desplegó anoche un intenso operativo de búsqueda en la zona, que se prolongará hasta mañana y que será por agua y tierra.
Al mismo tiempo, precisaron que una de las principales misiones es desenterrar a la aeronave, lo que le permitirá a los investigadores tener más detalles sobre las causas de la caída.
Del operativo participan el Guardacosta 78 Madryn de la Prefectura con buzos tácticos, entre otros. Los investigadores intentan descifrar qué pasó con los tres tripulantes que estaban a bordo: los pilotos Matías Ronzano y Facundo Vega, y el pasajero Matías Aristi.
Los primeros análisis arrojaron que la caída de la aeronave no fue controlada y que habría sido de punta, ya que sólo se observaba su cola cuando fue encontrada semienterrada en el pantano. El mismo había sido sobrevolado unas 50 veces, pero la vegetación del lugar impedía la clara visibilidad.
La avioneta había desaparecido el lunes 24 de julio a las 14.30 hs, apenas minutos después de despegar del aeropuerto de San Fernando rumbo a Formosa. Los pilotos perdieron contacto con la torre de control cinco minutos después de despegar.