Carlos Tasinato, director de Vectores de la Municipalidad, explicó la causa de la invasión de golondrinas que se vio en los últimos meses en la plaza Pringles y trajo como correlato un olor nauseabundo y suciedad en uno de los espacios verdes más emblemáticos de la ciudad.

«La golondrina es ya un visitante en la ciudad de todos los años, en algunos puntos y momentos más que en otros», remarcó el funcionario e indicó que «lo que está ocurriendo ahora en la Pringles está asociado al armado de la bandada para retirarse». Sobre ese punto, señaló que el espacio verde del Paseo del Siglo «no es un espacio de anidaje, se están concentrando ahí en un gran número para armar su vuelo migratorio».

Por otra parte, destacó que «las especies migratorias tienen un alto valor biológico porque sirven para el control de ciertas plagas, incluso algunas que implican riesgo sanitario, como los mosquitos». Así, señaló que hay un convenio internacional firmado en Alemania de protección de esos especímenes, al cual adhirió Argentina en 1983. En tanto, recalcó que «las golondrinas no son una plaga».

En cuanto al olor nauseabundo y la suciedad acumulada en la zona expresó: «Cuando hay una gran concentración de aves suceden inconvenientes por las deposiciones» y añadió: «Es difícil establecer qué patrón siguen a la hora de elegir un lugar determinado. Quizás se enamoraron del paisaje, de los árboles que tenemos en ese lugar, que son muy altos».

Además, si bien no pudo precisar la fecha en que emprenderán la retirada explicó que «tiene que ver con cuestiones ambientales, como la baja de la temperatura. Como son especies insectívoras, y los insectos desaparecen con las bajas temperaturas, que ya estamos teniendo, quizás eso haga que en pocos días migren».

Por último, pidió paciencia a los vecinos y aclaró que el municipio continuará con tareas de limpieza, que intensificará cuando las aves se retiren.

AUTOR

Rosario Nuestro

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