Por Diego Montejo
Por décimo año consecutivo, la delegación oficial de Santa Fe presentó su propuesta artística en el escenario Atahualpa Yupanqui en la edición 58ª del Festival Nacional de Folclore de Cosquín. También formaron parte de la grilla, Lucio Rojas, Soledad y Jorge Rojas.
A través de la iniciativa del Ministerio de Innovación y Cultura y dentro del marco Postales de Provincia, Carlos Pino y su conjunto, Los Originales Trovadores, fueron homenajeados en la séptima luna del festival de Cosquín como parte de la propuesta de la delegación santafesina.
Con una Plaza colmada y expectante que los aplaudió y ejerció silencios respetuosos en cada intervención musical, el histórico grupo vocal dio un repaso breve de sus 55 años de historia musical. Esa misma plaza fue la que en 1963 les dio la consagración con la canción Puente pexoa.
En esta ocasión, la delegación contó con la presencia del ballet dirigido por Imanol Gabriel Muñoz y Elizabet Bellini, conformado por estudiantes, ex estudiantes y docentes del Instituto Provincial de Danzas «Isabel Taboga» de la ciudad de Rosario que acompañaron al cuarteto vocal como parte de la propuesta artística.
Con una estética contemporánea en lo escénico y en los vestuarios, tanto de los cantantes como de los bailarines, se amalgamaron valores de aquellos tiempos, con canciones de alto grado de representatividad en el sentir popular como El Paraná es una zamba, Cambá Poriajú, Malambo, Chayita del vidalero y Puente Pexoa. La memoria fue el eje de construcción artística que se propuso esta delegación y se logró con una complicidad absoluta del público en la noche coscoína.
Los Originales Trovadores fueron parte fundante del boom folclórico de la década del `60 junto a otros conjuntos como Los Chalchaleros y Los Fronterizos. Su repertorio marcó el camino de las generaciones venideras quienes descubrieron a través de sus canciones una forma diferente de entender la música popular desde una estética vanguardista. Fueron pioneros en la incursión de los arreglos vocales dentro del folclore y en su estética de vestuario con sus esmóquines negros cuando lo común eran los trajes de gaucho.
Los Originales Trovadores están integrados por Carlos Pino quien es uno de sus fundadores, Eduardo César Impellizzeri, Gustavo Rubén Gentile y Eduardo Luis Catena. Fueron acompañados musicalmente por Marcelo Stenta (dirección musical y guitarra), Julián Cicerchia (guitarra), Marcos Montes (bandoneón), Charly Samamé (bajo), Cristián Vega (percusión) y por los cantantes invitados Agustín Matías Pistone y Vanesa Baccelliere. La coordinación general estubo a cargo de Marcelo Nocetti y la puesta en escena fue de Enrique Gabenara.
Desde el 2009 la provincia de Santa Fe dice presente en el Festival de Cosquín a través de sus delegaciones que con sus variadas propuestas han homenajeado a lo largo de los años la cultura de Santa Fe.
La apertura de la séptima luna del festival mayor del folclore estuvo a cargo de Lucio Rojas, hermano de Jorge, quien como habitualmente suelen hacer los Rojas, brindò un espectáculo de gran jerarquía con efectos especiales, luces y una pareja de baile acorde a cada una de sus interpretaciones.
La propuesta musical centrada en la música del Chaco Salteño, comenzó con un segmento de chacareras para después terminar con cumbias y carnavalitos. La platea recibió muy fervorosamente al elegido de Jorge rojas quien ya fue consagrado en la última edición de Jesús María y se perfila también para serlo en este festival.
Una de las artistas consagradas que llegó en la noche del viernes a Cosquin fue soledad Pastoruti quien desde hace un tiempo evoluciona en cada uno de sus espectáculos. En esta oportunidad emprendió su actuación con un repertorio totalmente renovado, canciones nuevas que nunca había cantado; Después, en conjunto con su hermana Natalia, derivó en temas clásicos, como siempre el público la ovacionó. Otra cosa para destacar, su cambio de vestuario, más relajado y colorido con un vestido blanco con flores rojas.
Jorge Rojas no deja de asombrar, fue el encargado del cierre de la noche, durante más de dos horas brindo un concierto destacable cerrando pasadas las 4 de la madrugada, prácticamente la plaza no lo dejaba ir al pedido de varios bis. Rojas demostró nuevamente su capacidad de convocatoria y fue junto a soledad quien se encargó de que entrada la tarde del viernes se agotaran las localidades.
En esta ocasión hubo clima festivalero, no solo en el marco de la plaza sino también en sus alrededores, muchos que no llegaron a comprar entradas decidieron tomar sus sillones playeros y escuchar el festival en la veredas cercanas a las puertas de ingreso. Esta noche fue la tercera vez que la plaza se llena, las otras fueron las de Luciano Pereyra y la de apertura con el fenómeno de Abel Pintos.
Otra de las propuestas de la noche fue el homenaje a Santiago Ayala el Chúcaro a través de una intervención del ballet nacional quien desde hace corto tiempo es dirigido por la reconocida coreógrafa y bailarina Silvia Zerbini. También fue destacado el patagónico Yoel Hernández quien en la edición anterior fuera el elegido de los espectáculos callejeros. Además, destacaron la participación de «A la par», que resultaron ganadores del Pre Cosquin y como dúo vocal desde la Sede Santo Tomé. Hicieron también de la velada, Emiliano Monti y Nahuel Lobos.