El presidente de la Nación, Mauricio Macri, visitó esta tarde a los efectivos policiales heridos durante los incidentes que se registraron en las inmediaciones del Congreso durante el tratamiento de la reforma previsional. El mandatario arribó al Hospital Churruca, en donde se encontraban internados algunos de los 88 uniformados agredidos el lunes durante los incidentes que se produjeron en las inmediaciones del palacio legislativo. El jefe de Estado estuvo acompañado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
«El presidente Macri me llamó anoche y esta mañana para ver cómo estaban ustedes. Estaba preocupado. Y tengo entendido que va a estar visitando a algunos de los heridos», había anticipado el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, en una conferencia de prensa, luego de visitar la sede de la policía de la Ciudad.
La mayoría de los policías fueron internados con traumatismos varios y problemas en la visión. Según informó el ministerio de Seguridad porteño, los efectivos sufrieron traumatismos oculares, politraumatismos y traumatismos de cráneo».
La Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, publicó fotos de la visita en su cuenta de Twitter y aseguró que el gobierno nacional está «con cada miembro de las fuerzas que hace su trabajo con compromiso y valor».
Maximiliano Russo tiene muy comprometido uno de sus ojos. El fue uno de los oficiales que terminó internado en el Churruca después de la brutal agresion de ayer. Estamos junto a él y con cada miembro de las fuerzas que hace su trabajo con compromiso y valor. pic.twitter.com/qV20L2bNNd
— Patricia Bullrich (@PatoBullrich) December 19, 2017
Fueron en total 88 los policías heridos en los enfrentamientos del lunes pasado en la Plaza de los Dos Congresos, en Capital Federal. Los golpes comenzaron minutos antes de que se iniciara la sesión especial en la Cámara de Diputados, cuando militantes de distintas organizaciones y movimientos comenzaron a atacar con piedrazos y palos a los efectivos de la Policía de la Ciudad que fueron asignados para custodiar el Congreso de la Nación. A partir de allí, se vivió una jornada de violencia que duró varias horas en el centro porteño. Esto obligó a reforzar el operativo con efectivos de la Policía Federal y la Gendarmería.