Ayer por la tarde un niño de 2 años ingresó al hospital Gamen —de Villa Gobernador Gálvez—, trasladado de urgencia en una ambulancia desde la vecina localidad de Alvear. Los médicos lo atendieron enseguida, pero el pequeño ya no tenía signos vitales.
Ante esta situación, desde el centro de salud se dio aviso a la Fiscalía de Homicidios Culposos y un rato más tarde se presentó en el lugar la investigadora Mariana Prunotto para interrogar al padre de la víctima.
Ante los pesquisas el hombre explicó que todo ocurrió por un descuido. Había preparado galletitas con veneno para matar roedores y en un descuido su hijo se las había comido.
En la casa donde ocurrió el hecho uniformados de Policía de Investigaciones secuestraron una bandeja de plástico con el preparado y un bidón que contenía una sustancia de nombre Furafarm.