El gobierno de la provincia de Santa Fe presentó un proyecto en la Legislatura para que los municipios y comunas puedan cobrar deudas del impuesto inmobiliario acumuladas hasta diciembre de 2017. A su vez, se otorgará un descuento de 10% en 2019 para los contribuyentes cumplidores. La medida surgió a pedido de algunos intendentes como una forma de conseguir recursos ante la caída del Fondo Sojero.
El objetivo es que los municipios puedan reclamar la mora de contribuyentes atrasados hasta diciembre de 2017. Podrá quedarse con el 60% del monto percibido. El monto reclamable asciende a 3600 millones de pesos en toda la provincia.
La coparticipación habitual que reparte los ingresos del inmobiliario (API) entre provincia y municipio en un 50% se modificará a un 60 y 40 a favor de las localidades.
El beneficio para el contribuyente cumplidor es para aquellos que no han tenido deudas en los últimos tres años (2016, 2017 y 2018). Se les aplicará una forma automática de un 10% de descuento en el ejercicio 2019.