La final de la Champions League entre Real Madrid y Liverpool se disputará este sábado en el estadio Olimpico de Kiev y enfrentará a dos futbolistas que atraviesan un gran momento: Cristiano Ronaldo y Mohamed Salah.
Este último, sin embargo, llegará en medio de una celebración que no le permitirá comer durante el día del partido: el Ramadán. Se trata del noveno mes del calendario musulmán, en el que, por cuestiones de fe y creencias religiosas, los fieles practican el ayuno mientras haya luz durante el día.
Este ritual, que comenzó a practicar el 16 de mayo y tiene fecha de finalización el próximo 14 de junio, le permite a los deportistas el derecho a abstenerse a llevarla a cabo por cuestiones físicas. Sin embargo, Salah decidió respetar rajatabla y afrontar de esa manera la final ante el Merengue.